El Tragamonedas
Todo hacia pensar que iba a ser un día normal, terminando mi primera jornada de trabajo, me dirigía a casa a almorzar, me esperaba allí un rico plato de chapsui, para luego reposar y después continuar con mi trabajo en el horario de la tarde. Estaba en la mitad de mi almuerzo cuando siento mi celular sonar, era Jane, mamá de mi hijo mayor, quien me dice con voz muy angustiada que esta con Mario Andrés en el colegio, ya que la habían llamado, porque en el recreo él, se había tragado una moneda!!!!! yo me asuste y le pregunté que como estaba, me respondió que estaba con dolores estomacales y con un poco de molestias en la garganta, se había tragado una moneda!!! Pero de chocolate, con papel metálico y todo , le dije que lo llevara a la clínica y que yo salía al instante para allá. Cuando llegué vi a mi hijo muy asustado, sentí en ese rato que necesitaba apoyo de sus papas, su cara era de mucho miedo, producto de que pensaba que lo iban a inyectar ( cosas que uno teme cuando es niño). Luego llega el doctor lo revisó, la moneda no estaba obstruyendo nada en las vías respiratorias y ya había pasado al estomago, lo único que nos restaba era esperar. Luego entendimos que solo fue el susto, ya que sus compañeros le decían que se iba a morir por lo menos, o que el metal de la moneda le iba a cortar los intestinos y mi hijo al escuchar esas cosas, quedaba cada vez más pálido y asustado. Luego vinieron las bromas, él se tranquilizo por que no lo inyectaron, que para mi, era lo que mas le preocupaba. Después lo fui a dejar a su casa, y yo a buscar a Martín Ignacio su hermano, el cual tal vez en unos años mas cuando lea este diario, él sepa que su hermano mayor fue este día un "Tragamonedas"